Podemos /Castilla - La Mancha
A día de hoy, 1.368 profesionales sanitarios se ven afectados por las incertidumbres creadas por el concurso de traslados para la provisión de plazas de personal estatutario, en las categorías: de personal facultativo, personal sanitario no facultativo y personal de gestión y servicios. Después de tardar cuatro años para convocar el concurso de traslados, cuando lo normal son las convocatorias anuales, las familias y los trabajadores siguen esperando en la actualidad a que se hagan efectivos.
Por parte de los servicios centrales del SESCAM Podemos, obtiene datos contradictorios. Aún no se sabe cuál será la fecha de publicación definitiva de adjudicación de destinos del concurso de traslados para la provisión de plazas. Se argumenta, según la última mesa sectorial, que primero hay que estabilizar la plantilla orgánica y convertir los contratos eventuales en interinos. ¿Qué ocasionan estas decisiones? A los trabajadores con contratos eventuales les dan esperanzas de mejorar sus condiciones laborales, aunque sin ninguna garantía de que eso ocurra, sino, más bien “confiando en la buena fe de la Consejería”.
La realidad es que algunas interinidades serán eliminadas al ser ocupadas esas plazas con los traslados externos. A esto habría que sumar la consolidación de puestos que llevaban años de manera ilegal, como eventuales, lo cual nos da como resultado un mantenimiento de la plantilla, sin aumentar el personal como se había anunciado, a bombo y platillo, desde la Consejería.
Además de la falta de rigor, destaca la falta de trasparencia. A día de hoy no se han facilitado los listados de personal eventual, ni el listado de cese de estos, para dar luego las prometidas interinidades. Desde Podemos Castilla-La Mancha solicitan que todo este proceso se realice de forma abierta y transparente, mediante un acto público en cada Gerencia, para la toma de posesión de las interinidades.
Por una falta de decisión política o ineptitud, los traslados externos están siendo retrasados constantemente lo que conlleva a una falta de conciliación familiar, además de un sentimiento de abandono de los trabajadores por parte de los responsables de la sanidad pública castellano-manchega.
Debido a todos estos motivos, creen imprescindible una explicación por parte de la Consejería de sanidad, aclarando dicha situación, para empezar a reconstruir la confianza perdida, así como hacer justicia a estos trabajadores, algunos de los cuales llevan casi cinco años fuera de sus casas sin haber dejado de cumplir sus obligaciones como los profesionales que son.
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